martes, 29 de abril de 2014

No me condenes a vivir sin ti


No me condenes a vivir sin tí,
seria una muerte injusta y lenta,
desangrarias mis alegrías . . .

... una a una,
cómo un marioneta me dejarias,
con las cuerdas sueltas.

Ni cómo juego me insinues un adíos,
eso desarmaria mis adentros 

por completo,
mis ánimos los dejarias 

esparcidos por el suelo,
me convertirias en arlequín, 

con el semblante muerto.

Mis labios carecerian 

y no ejercerian sonrisas,
mi cara se transformaria 

en pantalla de la tristeza,
de mis manos se escurririan 

completamente sus bríos,
para quedar tan sólo sombras 

de lo que un día fueran.

Si te perdiera, perjuraria 

que no existe el cielo,
mis rezos se convertirian 

en apatía y renegados gestos,
el sentido comun de la vida 

se matizaria de negro,
mis anhelos, sueños y fantasías, 

se congelarian en lo eterno.

La condena de vivir si tí. . .
seria igual que vivir sin sentido.